jueves, 7 de abril de 2016

La llorona de mi colonia


Yo ya no se ni que pedo, ando todo confundido, y es que no se si fueron las siete cubitas que me tome o el cuadro purpura que según el juan, hizo que el jendrix creara el experience. Salí de la fiesta a bordo de mi motocicleta con el fin de librar las olas que se creaban en el asfalto, llegando a mi casa sano y salvo. Son las tres de la mañana. Vivo en la calle cienega 25 de la colonia Los reyes coyoacan una colonia muy vieja al estilo colonial, la mayoría de las calles son empedradas, sin banquetas, pareciera que fueron colocadas a manos y con un detalle casi artístico, al pasar los autos se escucha un sonido muy particular que me recuerda el trotar delicado y elegante de los caballos. Es una colonia vieja y por lo tanto tiene su leyenda. Dicen algunos incrédulos que por esta mi calle, se aparece la llorona, siempre que escucho algo así  no hago mas que cagarme de risa y responder que ¿cómo va a ser posible?. La leyenda cuenta que en la antigüedad en la época de la inquisición, quemaron viva a una bruja junto con sus hijos y que ahora deambula por las noches en busca de ellos pregonando un escalofriante –Haaaaaaaaaay mis hiiiiiijos, haaay mis hiiiijos. Que   camina con un vestido blanco entre la neblina de la madrugada. Estoy hincado en el sofá de la sala, viendo atreves de la cortina de la  ventana. Los colores que hace un rato decoraban mi visión se han esfumado, apagado, todo esta en blanco y negro como película gacha y la estoy viendo. Escucho ese famoso escalofriante haaaay mis hijos. No puedo dar crédito a lo que ven mis ojos. Se esta alejando, pasa frente a mi casa, me esta viendo, la hija de la chingada me esta viendo. Le indico con el dedo índice en señal de negación que aquí no están, encojo los dedos de la mano y le pinto unos guevotes. Bajo del sillón y me retiro confundido a escuchar purple haze del Hendrix.
a por las yemas de los dedos y separo dos para mi, dos billetes para el huicho y para el tito la recompensa fue mayor este recibió seis grandes y coloridos billetes. Hoy son las nueve de la noche y como todos los jueves esperamos al tío huele patas bajo el faro fundido del callejón  del cine fray Servando. 

martes, 16 de febrero de 2016

Los canallas

La sugerencia del padrino fue, “Busca y encuentra trabajo, de que no importa, pero mantente ocupado, bien pinche ocupado”.
Habían transcurrido ya los tres largos meses de internamiento en el centro de rehabilitación Reencuentro ubicado en la zona residencial lindavista, un lugar que lejos de parecer un anexo, más bien parece una clínica de esas de alcurnia ego estilo oceánica, solo que acá el costo es muy inferior y en ocasiones como fue en mi caso, gratuito. En este lugar a diario comíamos carne, las compañeras enfermitas estaban rechulas, fresonas, el alcohol y la droga no discriminan al igual que yo. Teníamos terapia sana, actividades como yoga, teníamos gimnasio, sala de computo, agua caliente, camas con cobijas limpias y almohadas, guardarropa personal, todos los domingos derecho a visita, en fin, una chulada de lugar para recuperarte del consumo de las sustancias. Nada que ver con esos anexos de los  cuales me habían hablado donde había golpes , terapia directa que lejos de ayudarte en tu rehabilitación, mas bien salías resentido con la familia y en esos casos la recuperación era nula. La IAPA lo consideraba un lugar digno para funcionar como centro de rehabilitación, esta ultima institución organizo un concurso para su cartel anual y este que les habla gano el segundo lugar entre diferentes controversias según fui enterado pues mi obra se debatió gacho con el primer lugar. En su opinión mi obra era muy ruda y fuerte para un cartel. Dijeran lo que dijeran, para mí se había perdido el primer lugar y nada me hacía creer que el segundo lugar era un premio.
Consiguete  un empleo en el oxxo, en una fábrica, en una gasolinera, no se pero ocúpate maestro. No vas a salir con tu diploma ese de segundo lugar bien orgulloso ahí mostrándolo y diciendo,  “estuve anexado y gane un segundo lugar , a nivel nacional, en una clínica de adictos, denme trabajo”, o si? Ocúpate, recuerda que a diario tienes que lidiar con tu enfermedad y que el ocio es la madre de todos los vicios. – Si padrino. Conteste convencido en seguir la sugerencia.
Camine por la roma-condesa, el ambiente no me atraía, sentía que ese lugar era demasiado fresa para mí, la gente fresa realmente me caga. Recordé a la gente déspota mal agradecida con tu servicio, las condiciones en la s que alguna vez había trabajado y me entro nervio.  Encendí un cigarro, me subí a la moto y me dirigí al centro histórico a buscar mejor suerte. Camine por sus calles deleitándome de su arquitectura que en momento me hacia distraer la razón por la cual me encontraba ahí. ¡Busca empleo! me dije. No era una tarea fácil, a mis treinta y cuatro años mi historial laboral no era nada atractivo para ninguna empresa o restaurant o patrón. En mi lista de empleos que en un día de ociosidad enumere,  llegue a un conteo de noventa y cuatro trabajos por los cuales había pasado, todos ellos perdidos en parte por mi forma tan deliberada de consumir sustancias por mis problemas hacia la autoridad. Elegir donde trabajar en mi juventud nunca fue un obstáculo, por el contrario, puerta que tocaba puerta que se abría, me llegue a dar el lujo de escoger los lugares donde emplearme,  a la menor inconformidad me daba de baja. Así pues fue como fui mesero de media condesa-roma, repartidor de Telepizza, dominós , Benedettis donde en la bolsa térmica me cacharon un caguamon ,mensajero de cuatro empresas, vendedor, ayudante, dyler, comerciante. Ahora ya a mis treinta y cuatro, el miedo me invade en cada entrevista, los uniformes me dan ñañaras, siempre que me intolera un patrón me dan ganas de madrearlo y algunas veces he llegado a la acción.  Aun no me entrevistaban y  antes de entrar a tocar una puerta ya me estaba conflictuando yo mismo. “Ocúpate”  Me retumbaba en mis oídos, “ocúpate”. Finalmente en la calle de Regina vi un lugar acogedor, lo que llamo mi atención principalmente fue un mural mal logrado que había en su comedor. –“Ese mural lo modifico yo”. Me dije para mis adentros. En esa misma calle hacia tiempo atrás y mucho antes de fondear tan gacho, decore con murales, alebrijes  un bar que por nombre tiene “El Albur”, hoy en suspensión de actividades, (pa variar).
Leí, “Se solicita ayudante de cocina, con y sin experiencia”. Me entreviste con el gerente. Fue rápido, un par de preguntas, llenado de solicitud y me cito para el siguiente lunes, esto fue un miércoles, según él para que comenzara un día tranquilo pues los fines eran los días mas pesados.
Se lo comunique el padrino y este me felicito. Llegue el día lunes  totalmente limpio, con libreta en mano para las anotaciones y según yo para ir boceteando en mis tiempos libres, el mural que les presentaría “ja”.
 Mis primeras actividades fueron, ayudar a pelar papas, cebollas, picar pimientos observar el preparado de los condimentos, salsas, estirar y preparar pastas para pizzas, preparar un sin número de ensaladas, picando verdes lechugas, jitomates, aceitunas, pepinos , quesos, deshebrar pollo etc., ha y lavar un mínimo de trastes. Al llegar el viernes todo fue cambio, mi área de trabajo solo fue el fregadero, lavar vasos, cubiertos, platos, entre trapos, licuadoras, batidoras, ollas de todos tipos y tamaños, vasos y mas vasos, tazas, tapas. Hijos de su puta madre dije. Lo que realmente necesitan estos culeros es un lava trastes, más bien eso tenía que decir el letrero. “Se solicita lava trastes”, un puto mozo, y no es que desmerece cualquier actividad económica, si no que hay que especificar las actividades a desarrollar chinga.
Mi horario de empleo era de dos de la tarde al cierre que era de martes a jueves a las 11 y sábados y domingos a las 1 o 2, según. El sueldo era el mínimo pero lo que realmente ayudaba eran las propinas, estas eran muy buenas.
La cocina  los fines de semana era un manicomio, los trastes seguían llegando las torres se acumulaban recordándome la torre de pizza en Italia. Un chico llego a mi rescate pues a de ver visto en mi alguna necesidad. Me yudo a lavar los trastes de buena voluntad. Casi lo beso al cabrón lo cual hubiera sido para el una forma agradable de pago pues después me entere que el chico era Putin o mejor dicho gay porque puto para mi es aquella persona cobarde ante la vida. En la cocina los fines de semana éramos cuatro, el chef, una ceñito bien culona la cual parecía tener dos rayas ahí en lugar de una, esta se encargaba de sacar los platillos presentables para las mesas, el sub chef un chaval de diesi nueve años de edad, trabajaba para este lugar desde hacía cuatro años, a su llegada de un pueblo de Oaxaca, su nombre no lo recuerdo pero trabajaba con mucho esmero, era bien amable, se dirigía a mí con profundo respeto a pesar de que el chamaco era mi jefa inmediato. Me explicaba cada cosa con paciencia, pero ese día ni un hola me había dirigido, no había tiempo. Finalmente lave hasta el último traste que salió, eran ya las dos con veinte dos minutos y estábamos recibiendo las propinas, generosas por cierto, a la par de la chinga que me había metido. El sábado dude seriamente en presentarme pero en mi interior escuchaba la voz del padrino “ocúpate” ocúpate. Esos malditos trastes no van a poder conmigo no me van a mandar nuevamente al pedo. Pensé.
Todo volvió a la tranquilidad el mismo martes pues los lunes era mi día de descanso. Si el peor día para descansar, pero que podía exigir, apenas estaba ingresando y tenía que soportarlo todo. Que poder hacer en mi dia de descanso. Lunes, no hay museos ni cineteca, extrañe el anexo, ahí a diario había terapia o personas con quien platicar de algo en común. Entendí por que el gerente me cito a principio de semana si me hubiera dado la chamba un viernes seguramente ni loco regreso.
Mi relación en el trabajo crecía favorablemente día con día , las meseritas estaban adog a mi recuperación, me transmitían espiritualidad con sus deliciosas carnes. De vez en cuando bromeaba con los compañeros incluyendo al putin, estos me invitaban a sus reuniones, a sus depas de solteros, me presentaron en una ocasión a dyler de los cuadros, este trabajaba en el restaurant de al lado, en esos días no le di importancia, pues traía la sobriedad a flor de piel, esos temas me eran muy ajenos, Aun.  Así transcurrieron algunas semanas. Un viernes por la mañana decidí ir a ver una exposición.  Entre al centro cultural España, no vi en ninguna de sus mil salas algo que lograra capturar mi atención, Salí decepcionado del lugar. Caminaba por el túnel oscuro que da a la entrada principal de la calle Guatemala cuando vi pasar ya de salida , el carrito espantoso que pone las arañas, ese pinche carrito que traen los repartidores de coca cola, jarritos , marínela y bimbo en el centro histérico pero que el gobierno de la ahora ciudad de México, acondiciono para que los oficiales de tránsito anden por todo el centro haciendo según ellos su trabajo colocando a diestra y siniestra los inmovilizadores de llantas, las mentadas arañas. – Hay no por dios. Exclame. Mi moto. Regularmente la estacionaba cada vez que visitaba el centro histórico, en un costado de unas gigantes masetas de un restaurant al final de la calle. A simple vista no se ve pero en esa ocasión de nada sirvió. La cámara lo había visto todo. Llegue a ella con la esperanza de que los oficiales no hubieran visto mi moto ahí estacionada, pero no fue así, la araña ya estaba colocada, abrasando con un cable gruesísimo la llanta trasera. La patee con fuerza  a esperanzas de poderla zafar, pero no, lo único que logre fue un dolor intenso de pie. Observe que del manubrio callo una hoja blanca de papel enrollada la cual describía todas las indicaciones a seguir para realizar el pago de la multa y así me fuera retirado el inmovilizador. Fui corriendo al restaurant para pedir un préstamo y así pagar la multa en una sucursal bancaria. Todo trascurrió en un tiempo justo para llegar puntual a mi hora de trabajo. Tenía las ganas de mandar todo a la chingada, pero recordé los tres meses de anexado, como me había podido, a duras penas apartar de el consumo tan despiadado de sustancias.  Me resigne a continuar con mi recuperación y el trabajo era parte de ello. -No todo va a estar de poca madre, van a venir pruebas y esas pruebas van a ser de acido mi cabron así que más te vale estar preparado. Me había dicho mi padrino. El padrino es como un gia muy importante en tu etapa de recuperación al cual hay que obedecer sin cuestionar la razón de sus palabras. Claro si es que se quiere alcanzar la sobriedad.
Este viernes los trastes parecían ser mas, seguían llegando cada vez mas, no había descanso alguno. Los comensales llegaban de todos lugares, parecía que salían de los interruptores, de las coladeras como cucarachas en la oscuridad. Mis manos no paraban de moverse, lavar lavar y lavar, esa era mi única actividad, me estaba convirtiendo en un experto. En forma de coraje a mi situación, mantenía la llave del agua abierta en todo momento. -Que se chinguen en pagar fuertes cantidades de este vital liquido, que se chinguen las generaciones posteriores a mi, que se chingue la naturaleza ,y que se chingen los gobernantes cuando se les cuestione sobre la carencia del agua, así, igualito a como me chingo yo aquí friegue y friegue trastes. Pensaba.
-Para que estudiaste la universidad irriael, para qué diablos te distes tremendas madrizas desvelándote estudiando los textos escolares , para que demonios tu madre se chingo y se sacrifico en comprarte libros y libros de texto , para que demonios hizo gastos de excursiones y pasajes , desayunos y desvelos, para que le robaste el tiempo al broder  que te capacito en matemáticas uno dos y tres, para que chingaos , dime para que chingaos te esfuerzas me repetía mi conciencia. Este sistema es una mierda, vuélvete un ermitaño aléjate de la civilización si así se le puede llamar a esto, vuélvete un buen ladrón y así nivela la economía, roba a las empresas monopolizadoras que no permiten el crecimiento de las pequeñas empresas, manda todo por un tubo.  Tenía tantas ganas de gritar de llorar, miraba al chamaco de Oaxaca como trabajaba sin problemas y como respondía  a todo,    -Si chef, si chef. En un momento de iluminación y calma, el chico se acerco a mí y con voz angelical me dijo, -Tranquilo irria, esto no es nada we. Mantuve la llave abierta del agua y me di vuelta. – Que esto no es nada? Le pregunte indignado.      - No me vengas con psicología barata, Yo tengo estudios mi cabron tengo hasta quinto semestre en la carrera de “arte y patrimonio cultural", como diez exposiciones de pintura, dos series armadas, como mil cursos de diferentes temáticas, he dado cursos carnal, me han publicado escritos, he tenido unos culos de viejas, patinaba increíble la gente se sentaba a verme, era un sansón para la mariguana, he sido todo un líder, he convivido en la mesa de altos pedorrajes, he estado en escenarios, he ganado premios y veme ahora chinga aquí lavando trastes y  tú vienes y dices que esto no es nada cabron? – Cálmate irria, mira we, yo vengo de Oaxaca, allá cortaba cebollas así agachado we. Se puso en cuclillas e imito agarrar unas y cortarlas. Empezábamos a las cinco de la mañana  y terminábamos a las siete de la noche we. Con un pinche solesazo de la chingada we, todo el tiempo agachado, la espalda me dolía, el cuello me ardía, los mosquitos me picaban, neta we esto no es nada. Y todo sabes para qué? Para un plato de frijoles con arroz, no nos daban más que eso, yo lo hacía para ayudar a mi mama. Había días que lloraba sin que mi mama se diera cuenta.  A la chingada decía yo y me quería ir, me levantaba y veía a mi mama ahí adelante que me gritaba – animo mijo. -Y yo me volvía a agachar y a chingarle nuevamente, no había de otra we, yo decía, no manches no existe dios we. Me secaba las lágrimas y le seguía chingando. Mi carnal se vino a la ciuda y después me vine yo, me traje a mi jefesita y ahora trabaja en un lugar de acá lado lavando traste, está bien tranquila y la veo contenta. No manches we esto no es nada. Por eso para mi esto no es nada we. Me volví dándole la espalda y dije. Ya párale wey, me vas  a hacer llorar, ya entendí. Continúe lavando los trastes. -Yo lave un años los trastes. Continuo.  Poco a poco fui aprendiendo y fui subiendo, esto neta es la gloria we.
Creí haber entendido la lección pero al cabo de una hora el sentimiento de euforia y frustración se me presento con mayor fuerza, Quería mandar todo a la chingada y tomarme un buen trago de cerveza de una buena vez. Resiste, resiste me dacia algo en el fondo, finalmente hoy es la fiesta de la nata. Bala mi compañera en turno llego un par de horas mas temprano que la hora acordada para ir saliendo de mi chamba, a la fiesta.
 Llamo a mi cel. y dijo Ya estoy aquí iirriael, sal. Me sorprendió pues en eso no habíamos quedado, era muy temprano aun, normalmente la salida el fin de semana era a las dos, en fin ella estaba afuera. Bala era para mi un trofeo a mi complejo de inferioridad, me sacaba algo así como treinta centímetros, no es que fuera muy muy alta, lo que pasa es que yo soy muy muy chaparro.
El teléfono sonaba cada diez minutos.- Ya mero? Te falta mucho?, te ayudo o puedes solo. Me decía.
 A la quinta llamada y en un break que los trastes me lo permitieron salí a su encuentro. Sorpresivamente vi que no estaba sola, que ya había echo migas con unos cabrones, para ser exacto tres cabrones y una chica. Se encontraban echando cubitas en la vía publica, ahí a las afueras de los canallas, así bien quitados de la pena. Y estos quienes son le pregunte. – A mira el es Raúl,dijo señalando a un güero gordillo de sudadera roja, este otro es Marco. Estire la mano para saludarlo. Y el dijo dudando. – Paco soy Paco. Dijo el joven  estirándome la mano en forma de saludo. – Si, si. Paco. Dijo ella, así, bien quitadita de la pena.    -Los acabo de conocer. Continuo. –Aquí afuera, que te parece?. -No pues está bien bala. Agregue con algo de nerviosismo pues había dejado la pileta abierta y los trastes seguían llegando. Regrese a mi lugar de trajo. Estaba en común comunicación con mi ser superior pidiéndole que la llegada del sierre fuera pronto cuando recibí una nueva llamada de la bala. –Oye acaba de llegar la policía y están aquí moliendo como es su costumbre, ya se quieren subir a estos gueyes.   –Pues apártate de ellos caray, metete al restaurant carajo.Tras reflexionar sobre la notica salí del restauran cuando los trastes me lo permitieron. El problema era con los tres tipos que me había presentado bala. –Metete a los canallas bala. – No ni madre yo aquí me quedo no estamos haciendo nada chinga. Tu metete y apúrate de una buena vez y ya vámonos, si. Me ordeno. Escuche que ya arrastraba las palabras es decir que ya andaba pedona. Normalmente cuando yo bebo me pasa lo mismo, unas veces ando contenton otras me da por llorar y otras, en su mayoría, por hacerla de a pedo. La idea de visitar al dyler se me presento. Me distraje con los trastes. Esto se está poniendo feo pensé.
 La torre de los trastes era enorme, la llave continuaba abierta y así había estado casi todo el día. Apenas terminaba con un edificio, que digo edificio rascacielos de trastes y la montaña volvía a ser enorme. Los gritos en cocina me estaban volviendo loco, los choques de los cubiertos se me metían en los oídos, la música había subido de volumen, los meseros no paraban de cantar platillos, la caja registradora abría y salía como lengua de niño encabronado, adentro y afuera, todos los sonidos parecían estar dentro de mis oídos. El teléfono volvió a sonar, no podía contestarlo mis manos estaban empapadas de agua. Volvió a sonar y conteste. – Irriael los policías se están poniendo bien pendejos y ahora ya me quieren subir a mi también. Sal y diles algo wee.Ordeno. Escuche ahí una lejana discusión. Salí del restaurant, el grupo de personas era numeroso, se habían trasladado a la calle 5 de mayo a unos cuantos metros de los canallas. Llegue y vi como una mujer policía trataba de sujetar a bala ella intentaba zafarse. -Irriael dile algo we. Volvió a sugerir la bala. Se me acerco un  uniformado un poco amable y me pregunto que, que era de mi la muchacha, obviamente muy muy menor en edad a mí.  – Es mi pareja. Respondí. –Ha pues mira. La señorita se esta poniendo impertinente, esta tomando en vía publica y ya los reporto la cámara. Era la segunda vez en el día que escuchaba que gracias  a esas mentadas cámaras mi día se estaba poniendo realmente de la chingada. Mire. Continúo el oficial. No sé si la señorita sea de este país , pero eso no la exenta de la sanción. Bala `parecía como brasileña y tenía un tono mamon normalmente al hablar, era morenaza alta y muy delgada, culona y plana de frente, con la cara fina y delgada. Dígale usted señor que haga el favor de abordar la unida y posiblemente le pueda brindar la atención más adelante. Mire oficial cuento con doscientos pesos, es lo único que me queda del trabajo de toda una semana, gano menos del mínimo, las propinas han sido muy bajas , en la tarde me pusieron la araña. “ Voy saliendo victorioso de un anexo, soy tan frágil como el cristal y cualquier des fortunio por mínimo que sea me puede mandar al pedo, en mis estudios no he logrado destacar nunca, odio con toda el alma a esta chica fresa, solo es un premio a mis complejos, odio las leyes y a los vigilantes de las mismas, odio el trabajo y a la puta sociedad, las normas de comportamiento y respeto se me hacen no mas que una muy mala mamada, hágame el puto favor de sacarse a chin gar a su madre de una buena vez con sus normas y que vengan años y cumpleaños de sentencias, arrésteme de una buena vez `por todas, por que no le temo a nada mucho menos a usted, sírvase dirigir su corcel ese con torreta a donde se le pegue su chingada gana, estoy arto, me escucha bien? Arto de todo” . Esto que esta entre comillas jamás me atreví a decirlo, pero tuve unas ganas enormes de comunicárselo.  Lo que realmente dije fue. Por favor oficial écheme la manita, cuento con doscientos pesos no mas, es todo mi día, y lo que me queda de una semana de trabajo, trabajo ahí mire . Dije señalando el restaurante Los canallas. Esto pareció tranquilizarlo. Ya casi es mi hora de salida. -Y por que no mejor le dijo a su novia que se metiera al lugar? Ahí no hay ningún problema de beber. Me aclaro el oficial.  – Se lo dije, créame se lo dije mi poli, pero ya sabe como son los jóvenes . –Está bien, está bien solo porque es tu chica he. Siguió diciendo el poli en forma de hacerme entender que me estaba echando la mano pues entendía mi situación.- Dile que aborde la unida y la bajo ahí adelantito , sígueme caminando y me das lo acordado solo por tratarse de ti. -Ok oficial. Muchas gracias.
Bala a duras penas hizo caso. Mas adelante bajaron a los tres. Al bajar bala se llevo las manos al rostro en señal de pena. -No mames , no mames irriael, nunca en mi puta vida. “Jajaja 22 años”. Dijo. Me había subido a una puta patrulla, nuuuuuuuunca weeee, weeee. El reloj seguía caminando y los trastes acumulándose. Resignado y después de `pedirle una disculpa a bala regrese a mi sitio. Torres de trastes se habían levantado en mi ausencia. El chef me recibió totalmente encabronado. -Dónde diablos has estado tu? Pregunto notablemente enfurecido. Me extraño pues a mí este puto nunca me dirigía la palabra. Normalmente cuando alguien me grita respondo con mas ira en forma de defensa, pero en esta ocasión no fue así, su tonito de voz me confundió, me agarro mal parado. –Mira esos trastes continuos. Apúrate a lavarlos. Resignado abrí la llave de la pileta al máximo y comencé a lavar y lavar a una velocidad que la experiencia obtenida me permitía. En cuanto terminaba de lavar una torre más alta a la anterior ya se había formando, el teléfono sonaba, se me resbalaban los cubiertos, tome el teléfono y al intentar contestar a la llamada el teléfono callo a la tarja de agua, lo saque vi que no sonó mas, el silencio que yo esperaba por fin llego. Un sentimiento de ira se apodero irremediablemente en mi. Tome con fuerza el teléfono y lo arroje al piso estallando en mil pedazos. A la verga. Grite. El chaval de Oaxaca brinco del susto. Intente salir y el chef se interpuso en mi camino. – A donde crees que vas. – Me largo. A la chingada. Dije. - A renuncias? Pregunto el chef. – Pero claro, ahí te dejo tus putos trastes.
 Me dieron en caja otros doscientos pesitos y me dirigí sin titubear a visitar al dyler del restauran de al lado.
-Dame un cuadro ordene. Pague y recibí veinte de vueltos. Bala seguía a las afueras de los canallas con su cara de encabronada. No me importo. Me trague el cuadro completito.
- Jamás me había subido a una patrulla irriael, jamás, decía mientras se agarraba recio a mis espaldas, mientras nos dirigíamos en la moto a la fiesta. Bala estaba realmente encabronada, Me culpaba de haberme tardado y de que por esa absurda razón ella había viajado media cuadra en patrulla. No sabes nada de la vida pensé.  Bala normalmente era una persona que no hablaba tanto,  mucho menos tan fluido, en sus diálogos solo se dignaba a decir,  si , no, ok . Era breve, pero esa noche la lengua no le paraba de mover. Tenia ganas de meterle el cuerno que tengo por sexo y embestirla hasta llegar a su garganta, bloqueando cualquier sonido.
 Conforme avanzábamos, el cuadro comenzaba a explotarme. Las estelas de las luces de los autos rajaban en destellos continuos, el pavimento se hacía chicle. Sentí viajar en una moto acuática rompiendo olas de pavimento  sobre el asfalto chicloso de patriotismo. Fuimos recibidos por la Nata. La fiesta era un éxito, entramos y mire la barra, detrás de ella se apilaban torres y torres de cartones de chela, recordé con paz lo que había dejado atrás y sentí un profundo alivio. Pedí un enorme baso de chela. – Vas a beber. Pregunto bala totalmente sorprendida.   – Solo una. Jajá. Respondí aguantándome la risa. Bala me observo fijamente. Noto en mi un cambio severo y radical de humor. Se me acerco agachando su rostro acercándolo al mío. Por un momento sentí que entraba por la puerta de mis ojos hasta tocarme el alma. Comiste verdad. Pregunto. Comiste y no me diste. No conteste nada. Se giro bruscamente y tomándome  de la mano me llevo  a paso firme con su grupo de amigos. Me sentí como regañado. Un chico del grupo se me acerco y cruzado de manos agrego. – Estas en etapa de aprendizaje y análisis verdad? Que tal como lo vez? Es interesante no? – Si demasiado interesante. Respondí. Di media vuelta y me dirigí a dar un recorrido por toda la casa , el patio era grande y en todos los rincones de la casa había gente unos sostenían sus vasos otros bailaban otros solo platicaban otros reían. Era toda una fiesta en el sentido de la palabra. Hice una larga fila para poder entrar al baño, cuando llego mi turno saque la vara de la vida en total privacidad, pero la lluvia dorada no hacia acto de presencia. Realmente nunca tuve ganas de hacer del baño. Mire el interior del espacio, el color era verde claro muy limpio y lujoso, Me imagine que si Carlota algún dia arrojo sus desperdicios, lo hizo en un lugar como este. En unas de las paredes había un hoja de papel rojo que decía en letras azules “No desperdicies el agua” Recordé mi mal comportamiento en mi ya anterior empleo como durante mi actividad constantemente dejaba la llave abierta, me sentí avergonzado de mi mismo. La metáfora estaba dada. Envaine el roble que porto por arma y Salí reflexivo del lugar. Mire curioso a cada individuo de la fila, pensé en que mensaje recibiría cada uno de ellos, como las letras se acomodarían para cada cual.  Mire sus rostros antes y después de estar en el baño, los rostros no eran los mismos. Tuve ganas de acércame y preguntarles. – Oye que tal estuvo tu mensaje, que leíste en el papel rojo? cual fue tu consejo. Pero no, lo considere un rato y me dije “eso es muy personal”. Regrese al grupo de bala, no participaba en las charlas es mas ni las entendía, ella de vez en cuando me dirigía una mirada indiferente . En un momento se acerco a mí, me tomo del brazo, salimos de la fiesta y nos dirigimos a hacer unas compras al oxxo peligroxxo de regreso vimos como dentro de un grupo de chavales había uno completamente ebrio, el  chaval vomitaba y vomitaba mientras otros dos lo sostenían de los brazos. Cuando pasamos a un costado de ellos bala comenzó a pegarle de gritos a un costado de su inclinada y remojada cabeza “-Eres un frito, eres un pobre fritazo, mírate nada mas frito fritooo, frito. Sorprendidos los que lo sostenían, al igual que yo, no hacían más que mirar a la eufórica bala lanzando su sapos y escorpiones. Me quede petrificado, jamás había visto reaccionar así a bala ante un grupo de gente Tal vez le recuerde a su padre ahogado en alcohol o cualquier muy mal evento. Pensé. Una vez que se sacio, me volvió a tomar de la mano  y me hizo entrar a la fiesta que estaba a punto de llagar a su feliz término. Con besos abrazos y felicitaciones nos despedimos de la nata. Ya aterrizando del viaje maneje hasta llegar a mi depa ubicado en la singular colonia barrio norte allá por mixcoac, me detuve en una tiendita y compre un par de caguamas para amenizar la estancia  según yo. Bala miro el contenido de las bolsas y exclamo, ¡Eres un fritazo!   


jueves, 5 de noviembre de 2015


Como te sientes?- Pregunto la de la bata blanca. – Bien. Respondí. Y usted?. – Bien , bien. Gracias. –Pues bien, cuénteme por favor, Que es lo último que recuerda?.
Mmmmmm, pensé.  Me vino a la emoción y no al intelecto, “angustia”.  Recordé una calle desolada, una calle que normalmente  está llena de gente que viene con la intención de hacer sus compras a buen precio , encomendados al señor para salir con ellas y no ser victima de la delincuencia. Pero esta mañana la calle estaba vacía , no se escuchaban,  ni  a vendedores ni a compradores.
-Platica Joaquín. Joaquín es tu nombre no es así ?.Pregunto inclinándose hacia adelante lo cual le permitió verme por encima de sus anteojos. Era joven, piel morena clara y cabello lacio oscuro. Por más que quería demostrar fortaleza, en sus ojos, no había otra puta cosa más que ternura o por lo menos fue lo que vi.
Pues bien, inicie. - Me encontraba bien dormido, y  una vez más la voz de una niña insolente interrumpía mi sueño, si, la misma voz, la misma niña, la misma sensación. Reconocí que era ella , la misma que escuchaba en mi departamento de Barrio Norte, la misma voz que escuchaba en casa de mi madre, la misma pinche voz que escuchaba en donde me encontrara. Era insoportable, pinche voz lenta así de hueva, alargada, infantil sin ningún puto ánimo de nada, embarrada de cajeta, pegajosa y molesta. –Ok, ok. Me queda claro. Y que te dice la voz? Pregunto la señorita como si no supiera platicar y todo se le fuera en cuestionar. Este tipo de interrogatorios no era nada nuevo para mí. Desde muy chavo he sido sujeto o diversos tipos tipos de interrogatorios en los cuales he sido bien pinche honesto, lo que no es muy inteligente de mi parte, sin embargo a mi se me dijo que la verdad nos hará libres y asi suelo ser, bien pinche honesto.
-Que que me dice la voz, dije levantándome de la silla y lleno de euforia.- Grita a mis espaldas dormidas, conteste.  -Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa.
-Ja. Le salió un pequeño impulsito de risa, lo que hizo que yo regresara a mi mente. -Ja? Le pregunte, inclinando la cabeza y mirándola fijamente. No no disculpa , continua por favor.
La voz es maligna, produce en mi una sensación de ira, acompañada de miedo, frustración y hasta de angustia. La voz me sigue a todos lados, regularmente aparece en las mañanas, por más que me escondo siempre llega a donde me encuentre. Dije levantado la voz a un minuto del grito. -Me persigue , me persigue.
-Ok, ok. Entiendo. Dijo la de la bata, continuemos con lo que recuerdas.
-Pues ya le digo. Estaba dormido ahí entre los puestos de Chucho Carranza, cuando a lo lejos, escuche la voz que cada vez se acercaba mas a mí, hasta estar a mi costado. Se cooooooompran coooooclchones , lavadoras, refrigueradores, tambores o algo de fierro viejo que veeeeeendaaaaaaaaa. Intente levantarme inmediatamente y por fin enfrentar a la pinche escuincla, mientras la sometía le preguntaría porque demonios hacia sus pinches compras con ese tremendo escándalo irritante y ensordecedor. Y lo que era peor aun. Por que las  hacia en donde yo me encontrara. No lo logre no podía salir de la lona, me había envuelto a tal grado que ni yo mismo podía salir de ahí. Me encontraba como un tamal sin carne, en una lona espantosamente mal oliente , húmeda con tierra de un tono amarillenta. Cuando por fin logre destaparme ya la niña no se escuchaba, pensé que seguramente me vio y se escondió en alguna de las vecindades. Era tanto mi enojo acompañado de mi crudísima husmee en algunas de ellas , claro sin meterme al 21, ahí ni de loco me vuelvo a meter después de tremenda zapatiza que me propinaron por andar de cabulita . no la halle. Regrese por estanquillo buscando a alguien que pudiera darme un trago para calmar mi temblorina y darme a la vez un soplo de vida, pero no no había nadie. Señorita, dije mirándola. la temblorina era tal , que si hubiera traído conmigo unas maracas , seria el mejor maraquero del país, que digo del país, del mudo, jajaja. Pero ni maracas, ni dinero, ni celular, ni llaves traía. Me comencé a preocupar, no había nada ni nadie, era martes, un mal martes, y es que los martes en tepito no hay nada mucho menos genere, parecía pueblo fantasma. Es buena hora de largarme de aquí, pensé. Tendría que poner nuevamente mi cara de estúpido ante mi madre y anexarme en su casa por lo menos una semana para reponerme física y emocionalmente, pues una vez mas los estragos del consumo cobraban su factura.
En diferentes ocasiones había ya intentado salir del barrio para intentar hacer una nueva vida, pero antes de salir me topaba siempre con alguien que me invitaba un trago o hasta sustancia. Siempre regreso a ese lugar es un espacio donde la gente esta familiarizada con el consumo.
Caminaba por estanquillo cuando a mis espaldas planas escuche. Yo soy el jefe de la mafia, todavía no ha nacido el que me pueda tirar, es mas ni nacerá. Era el güero de la piel, quien me estiraba la mano sosteniendo un tonayan en forma de brindis. Lo tome inmediatamente, Intente darle un buen trago pero mi cuerpo lo rechazo rotundamente provocando en mi contracciones de estomago que culminaron en vomito incontenible durante un minuto y medio, expulsando de mi un liquido amarillento con cuajos rojos, el liquido salía por la boca ,nariz, ojos , chisme y culo. Padre nuestro perdona nuestras ofensas , no nos dejes caer en tentación amen. Guack, guack guak.  – Aguanta carnalito, yo se lo que se siente , haber dame mi trago. Chale Tintan, dijo el güero de la piel, esto te pasa a ti y a todos los demás por cocteleros, se quieren meter de tocho morocho en una sola noche y mira los resultados, nooo, y lo peor es que ni tragan.
Sentía que mis palabras no lograban impactar o ser bien entendidas con la fuerza necesaria. Y es que siempre utilizo las manos en forma de apoyo para ayudarme a hacerme entender, sin embargo la camisa que me habían puesto no me lo permitía.
-Yo conozco un lugar donde te pueden ayudar a recuperarte de este estado. Dijo nuevamente el güero de la piel. Pero ese lugar no es para gente como tu y yo y sabes por qué? Porque nosotros ya estamos dados. Estas últimas palabras me retumbaron en la mente. Ni madres dije. Logre incorporarme hasta llegar a la estación de el metrobus Ricardo Flores Magon. Recordé inmediatamente el periódico Regeneración, sentí en mi una inyección de energía. Me cerciore que el policía estuviera como es costumbre en los torniquetes, me dirige a un costado y apoyado en el barandal que indica el tope del convoy apoye mi rodilla haciendo palanca subí e ingrese de forma ilícita al anden, logrando así ahorrarme los seis de la entrada, seis más cuatro, diez. Justo lo que traía en mi bolsillo y que me serviría para comprarme un tony allan. Mis deseos no eran de volver a agarrar la fiesta , si no por el contrario, y el tonayan me serviría para ir disminuyendo la cruda y el síndrome de abstinencia el cual se vendría durísimo. Padre nuestro que estas en el cielo, santificado sea tu nombre danos hoy nuestro pan de cada día, perdoooona nuestras ofensas como nosotros también perdonamos a los que nos ofenden no nos dejes caer en tentación y líbranos de todo mal amen. “Ya estas de puto” dijo una voz ronca y después rio. Jojojo, jajaja.
Diosito ayúdame me cai que si salgo de esta ahora si , ahora si no vuelvo a chupar. De esta manera me fui toooodo el camino hasta llegar a la puerta de la casa de mi madre. Toque pero no hubo respuesta. Ella vive en un quinto piso de una unidad habitacional, para mi no es ningún problema ingresar por la ventana descolgándome de los tubos del gas, pero dado mi estado dude un par de minutos , finalmente la soteguela me recibía , posteriormente la cocina con su refri generoso, el cual ataque sin piedad. Tenía que aprovechar que la comida me entraba. Comenzó una etapa más de repón. Me di cuenta que no había comprado el toni, y en casa hacía tiempo que el alcohol de tapa roja había dejado de ser miembro del botiquín de primeros auxilios. El miedo se apodero de mi. Lamente profundamente mi descuido y es que era tanta mi prisa de protegerme en casa que camine sin pensar otra en otra cosa que llegar a ella.
Por momentos lograba dormir, los sueños eran demasiado reales, en su mayoría negativos, que consistían en peleas, robos, discusiones, un sentimiento de soledad se alimentaba a cada momento. Me despertaba totalmente angustiado , con unas ganas de llorar tremendas. Algo me oprimía fuertemente el corazón , una sensación de angustia total me cobijaba. Tras despertar recordaba inmediatamente todas las fechorías cometidas, por mínima que sean. Tragarme tierra grite. Me levante me mire al espejo y el wei que se reflejaba para empezar no con insidia con la edad mental , me sentía más joven sin embargo las marcas de la vida por el rostro, reflejaban más edad. Veía a un tipo al que yo mismo reprochaba, ropa andrajosa y mal oliente, las eche a lavar. No tolere mas estar en esa posición y nuevamente me fui a mi refugio , la tv que distraía cualquier encuentro conmigo mismo.
En los diferente anexos en lo que he estado he aprendido ciertas técnicas para evitar ataques y calmar la temblorina , así como para ir reduciendo paulatinamente la llamada cruda. Consiste en una dieta a base de tes y comida ligera llena de caldos y verduras, todo esto sin un solo irritante, este último es mortal en estas circunstancias, te da un chorro imparable. El proceso tiene una etapa critica que son los tres primeros días, esa etapa es muy difícil y en el proceso se puede uno quedar en el viaje, puede la mente crear infinidad de cosas irreales y suicidarse o dañar a otros, los miedos son terribles. Recuerdo en la lectura y narraciones de los anónimos realmente relatos de miedo, de horror, que en su momento te espantan el consumo, Dices ni madres ya no voy a chupar para evitarme cometer ese tipo de actos. La lectura hablaba de un tipo que llego a su departamento, totalmente ebrio, que llego hasta las manitas, y que por la madrugada se despertó, bajo un estado de delirium tremens, y vio una araña tremenda caminando por la alfombra,
El don tomo un bastón o paraguas.  No recuerdo bien. Y le atizo severa madriza a la araña gigante hasta matarla. Posteriormente y gracias a la esposa, se entero que esa araña al a que le propino severa chinga, no era más que su hijo quien gateaba por el cuarto. En mi caso no he llegado hasta estas alturas pero me conformo con los relatos y me digo, eso a mí no me pasa.
En mi primer día de abstinencia suelo tomarme un tonayan , es decir chiquitiarmelo durante todo un día, y así la cruda es mas tolerable. Si no se tiene un trago la cosa se complica, pasar esta primera etapa sin alcohol es terrible, se intensifican los males y los malos. Pero parar es inminente si se quiere sobrevivir y nuevamente consumir, esto es inevitable. En este dia se duerme, en mi caso muy personal, todo el día, sin poder diferenciar entre la realidad del sueño. Pasando en  ellos acontecimientos desagradables, muertes, peleas, choques, discusiones, ruidos intensos, caídas, escaleras interminables, carreras lentas , persecuciones frustradas, miedos. Hay que evitar en la medida de lo posible , todo contacto con el agua durante los primeros días, pues esta desata  en el cuerpo las convulsiones, no es recomendable ni lavarse las manos , ni los dientes , mucho menos bañarse.  La sustancia da hidropesía y el alcohol no permite el contacto con el agua. En el segundo día, uno pensaría que ya la libro, pero no es así, la cosa realmente empeora de verdad. Este día consiste básicamente en tener una cubeta a mi alcance pues el vomito es espontaneo y continuo, contracciones sin cuento, expulsando un liquido verdoso que al paso, se va aclarando hasta llegar a un fino amarillo canario con plumas rojas. Este liquido deja un sabor en el paladar, amargo, acido, con un aroma a vinagre con huevo con salsa valentina batido en una licuadora.. Cada contracción se sufre. Rezo a cada momento, prometo no volver a consumir,  me arrepiento de todos mis pecados, mientras ellos parecen salir de mi a cada espasmo, expulsados entre ese liquido de mal olor y aspecto que no solo sale por la boca sino por los ojos, la nariz, la boca el pena y el culo. Por los poros de los brazos ciento como sale el sudor cada poro se resiste a ceder. Que le cueste su recuperación, en este segundo día, no se duerme, se suda intensamente, las cobijas parecen cobrar vida así como los muebles y la tv te habla directamente, pero es peor escucharte a ti mismo. Si se logra sobrevivir a este segundo día, ya el tercero es mas liguero y lo importante es que en este comienza la recuperación, pues el alimento comienza a entrar al organismo. El único malestar es psicológico pues me la paso recordando todo y por lo regular no es muy grato. Tomo regularmente te ligero en buenas doisi y lo mas caliente que puedo, caldo de verduras y con suerte un poco de pollo, todo esto y es importate aclararlo , sin irritantes.
Dependiendo en que canal me alla quedado , zoombie o lucido, comienzo la recuperación.  Puedo hacer ejercicio y despabilarme inmediatamente, o puedo quedarme todo el puto día mirando al techo y viendo tv, hasta que por fin salga de la depresión.
-Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa.
Continúe con mi relato. Desperté sumamente espantado al cuarto día de permanecer en casa, no sabía en donde me encontraba, me incorpore en el mismo sillón sudado de la sala, mire a mi alrededor, pero mi mirada se movía por consistencia propia, tenia vértigo, estaba bien pinche mareado, es mas hasta deje de prestar atención a la vos. Cada vez la cosa se pone más seria después de un intenso consumo. La cruda exige más. Me agarre al sillón con las uñas negras como el carbón incrustadas al sillón para no salirme en cualquier vuelta.
Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa.
=Ya basta. Grite. Detente por el amor de dios.
Dios ayúdame chinga, no es justo. Desde niño te he pedido ayuda y nunca me has  escuchado, por eso mismo desde muy pequeño deje de creer en ti , como no hacerle caso a un niño que te pedía durante toda la semana que  tuviera paz los viernes por la noche. Te rogué que no te llevaras a mi mejor amiguita y mucho menos de esa enfermedad o que por lo menos disminuyeran los dolores. Te pedí que Paquito ya no hiciera tantas travesuras y que curara las heridas de Lau, que pararas las voces. Que mi padre estuviera con nosotros, pero no nunca escuchaste. Ya más grande volví a creer en ti pues no encontré otra opción , pues la medicina no lograba acallar finalmente esas voces, te he pedido nuevamente que me ayudes a parar por fin este consumo, he tenido que ir a reuniones religiosas y no lo he logrado , ósea ya estuvo , por favor que pedo, He pertenecido a grupos anónimos donde a partir de ahí y con un principio espiritual mi vida ha dejado de ser privada, con la finalidad de parar , pero ni madres, nada pasa nada me sirve , ya has paro total, ayúdame chinga. Esta pinche escuinla me va a volver loco de remate. Dile que deje de seguirme, que haga sus compras en otro lado, en otra ciudad, mátala o arráncame la vida de taco , de una buena vez. Ya estas de puto. Dijo una voz ronca. Jojojojajaja.
La de la bata blanca apuntaba con seriedad todas y cada unas de mis palabras con una pluma Bic tinta azul, sobre unas hojas sueltas rojas. que pasaba velozmente una tras otra. Levante la mirada, era un espacio amplio y de techo alto vi por la ventana bien protegida el cielo azul, con sus nubes bien pinche blancas inevitablemente pensé en dios, Jojojojajaja.
En mi mente se había despertado un sentimiento de venganza. Dejaría de beber, haría ejercicio, con una rutina de tres series de cristos, cinco series de águilas en la paralela, tres series de abdominales de cincuenta cada una, dos series de sentadillas de veinte, y para cardio, una vuelta a la presa  trotando y al mes, el cual nunca llegaría.
La venganza consistiría en sorprender a la pinche escuincla. La imaginaba de seis o siete años, con su vestidito de verano blanco con flores azules, imaginaba que en una mano sostenía el micrófono que hacía llegar su voz hasta mis oídos y que en la otra sostenía una guajolota de mole, el cual le había manchado sus rojos labios. Le atizaría un soberbio soplamocos entre ceja y oreja como buen instructor de kun-fu. Su padre quien seguramente conducía la camioneta chevrolet ochentera y de un tono grisáceo, intervendría para proteger a su hija la cual ya estaría pegando de gritos en ese momento. Al padre lo imaginaba , goordo,sudoroso, moreno de tono rojizo por exposición al sol, despidiendo un olor a todo, principalmente a culo, vestido con una playerita blanca de esas de tirantes que suelen portar orgullosos los mamados de tianguis toditita percudida, de pantalón azul de poli jubilado, tenis jordan negros con blanco y rojo. Ya con el padre era otra cosa, más bien él era el culpable de todo pensándolo bien y pensando en su mentalidad siniestra recordé que a los malos les huele la boca muy pero muy mal, y en lugar de solucionar las cosas a palabras no le daría oportunidad de defenderse con su lengua viperina y mas afilada que un cuchillo. Tendría que enfrentarlo a golpes y para ello me estaba preparando. Una vez que lo dejara tendido ahí en el suelo, le daría órdenes. No vuelvan a seguirme, de salir de la ciudad, de que sus compras las hicieran en Querétaro, Chiapas , Oaxaca o Guatemala, pero lejos muy lejos de mí, de no hacer lo indicado secuestraria a la niña , la llevaría a Juárez y ahí seria una cruz mas del estado.
Regrese, vi a la de la bata blanca, estaba paralizada, no sé en qué momento me dispare tan gacho, pero cuando la vi esta estaba como en trance, totalmente clavada en la narración. Se había quitado los lentes, lo cual me permitía ver unos ojos más pequeños que en un principio, no tenia arrugas aun, su mirada brillaba tenía esa luz de la esperanza, sus labios rojos, brillosos y sensuales contrastaban con el opaco polvo de su piel. Unos bellos asomaban por las fosas nasales, negros, parecían tener unas manitas que me decían -Hola Joako!!!..
-Respire profundamente llenando mis cavidades y continúe con lo último que recuerdo. Pensé en ser mucho menos expresivo , en no levantar la voz en tan solo seguir las indicaciones al pie de la letra y ser eso si , muy honesto , para no caer en contradicciones que puedan alterar todo, finalmente solo soy un tipo que no ha podido dejar de consumir y que por consecuencia no he podido realizarme como hubiera querido, ósea no soy un asesino, no soy un violín,  no secuestro ni extorsionó , no soy caníbal ni pedófilo, ósea soy ojetin por momentos robo una que otra cervecita, pero delitos graves no cometo, o hasta que se me demuestre lo contrario.
Pues bien continúe, el plan estaba echo. Llego un día mas de anexo, al tercer día me da hambre , intento recuperar todo lo perdido pausadamente pero comiendo durante todo el día. Llego el sábado, habían pasado miércoles, un inolvidable y terrible jueves, y un viernes de total repón. Sábado me sentía mejor aun que con la mente totalmente distraída y con demasiada inseguridad, pero mejor. –Como te sientes. Pregunto una voz tierna mientras acariciaba mi cabecita de treinta y cinco añotes. Bien ma le respondí. – Tenemos que hablar, ahora salgo pero tenemos que hablar. – Esta bien conteste, solo deja me repongo por que en estos momentos me encuentro muy vulnerable deja aclaro mi mente y hablaremos de lo que gustes, ahorita no tengo defensa. Tenía que incorporarme y llevar a  cabo la venganza lo antes posible.
Extrañamente en esos días no hicieron acto de presencia, ni la niña ni su voz, pensé que probamente, utilizando alguna artimaña extraordinaria, habían descubierto mis negras intenciones y que finalmente se alejarían de mí evitando así un lio gordo y paz en las dos partes. Sin embargo yo no afloje y me continúe preparando arduamente.
: Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa.
Volví a escuchar asome la cabeza desde la vetana del quinto piso , logre ver una camioneta idéntica a la de mi imaginación, vieja , raspada y golpeada, no era gris era azul marino, encima de la cabina, como cuerno de rinoceronte estaba colocada una trompetota que permitía que la voz llegara hasta el rincón mas lejano para que nadie se quedara sin escuchar. Por mas que le busque no logre ver a la siniestra niña con su vestido de verano. Donde demonios la escondes me preguntaba. Seguramente estaba entusada entre todo el montonal de cosas que cargaba la chevrolet.
Una idea nueva me asalto mi cabecita loca. Y-si-e-llos, basándose en un poder  sobrenatural, se están robando mi energía, mi suerte. Pensé que a lo mejor yo tendría que estar haciendo esas compras en lugar de ellos, y con el mismo éxito o mejor aun con el doble de éxito. Razón por la cual siempre andan de compras en los lugares donde yo me encuentro, robándome así toda mi suerte, mi anergia, eso es lo que ocurre , me están robando lo que a mí me pertenece. Algo me mantiene en constante consumo, si claro como no lo había pensado, ahora que mi mente se comienza a aclarar me permite ver la realidad mirar mas alla, analizar las cosas. Es como cuando el estado utiliza las sustancias para mantener a la gente sometida, el soma del Huxley.
Habían pasado  tres semanas sin consumir, me sentía recuperado, nuevamente con sueños , ya sugería la comida en la casa, ya sentía que atraía nuevamente las miradas de las chiquillas al pasar, tenia sueños , esperanza y proyectos, en cuanto a lo material, recupere un celular empeñado, traía cartera y chamarras nuevas, pintaba y escribía, comencé a salir al cine , leía , caminaba con soberbia, nuevamente comencé a criticar las formas de consumo, la economía del país, criticaba la actitud del humano para con su planeta, os malos gustos musicales chunta chunta,  me quejaba rotundamente del trafico , imaginaba que si seguíamos así como hasta ahora , en breve la ciudad se colapsaría no abría ni pa tras ni padelante, no daba lugar a los programas televisivos me quede loco cuando vi señorita Laura, por poco y me suicido , pensé que había gente peor aun que yo, critique y me frustre ante los monopolios, pensaba en la explotación laboral , en la contaminación, en las modas, en la pareja, en mi soledad, en mi consumo, en cómo me robaban la energía , pensé en matarlos, me entro miedo y preferí ya no pensar más, y cada vez que esto pasaba , prendía la tele. Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa.
Por fin había encontrado un nuevo empleo, era mi quinto empleo del mes y estábamos a finales de junio. El trabajo consistía en ayudar a hacer tambores para bocina, si ahí en el mismo lugar de mi fondeo , en la plaza estanquillo entre perlillar y boca negra, en el mismísimo barrio de tepito. Salí de la plaza por que el taller esta dentro de la plasita, salude al “socio”, el tatuador que trajo las tintas de color a Mêxico en los ochentas, tras de él, a sus espaldas estaba el buen Mike, quien con su voz ronca y amigdaloza me pregunto fuertemente. Porque te cogiste a mi patito? Salí rápidamente preguntándome, Cual pinche patito? Iba directamente a la tienda y escuche un – Hola isra, que haces aquí weee?. Era Mc Pelusa, nos dimos un abrazo como si realmente fuéramos amigos de toda la vida, lo cual no es asi, pero en la farándula artística se derrocha mucho caldo, fingí estar realmente  encantado por el encuentro, hablábamos de sus proyectos como Mc, los cuales eran un resto, y mientras yo veía como se movían sus carnosos y besables labios, mientras meneaba con singular alegría sus enredadísimos pelazos que hasta bob Marley hubiera querido tener, cuando escucho la voz. Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa. Esto ahora si ya es el puto colmo. Pensé  Hasta en el mismísimo barrio se meten para robarme a mi, a mi. La bomba había sido soltada sin piedad alguna, tenia el pretexto perfecto para atacar. Es idéntico a cuando un país es atacado por otro, y este tiene que defenderse , el pueblo se lo demanda, hay otros países mas mañosos que hasta ellos mismos se atacan para justificar la invasión a otros países , atizando estrategias como hundiendo sus propias bases navales o derrumbándose sus propios edificios, o fingen hacer paro en países ricos para derrocar al líder y así introducirse con mayor facilidad, logrando sus propios objetivos. Mire bien a la camioneta, paso así enfrentito de mi y Mc pelusa , no los ataque , no era el momento. Pelusa pensaría que estaba loco . No preferí esperar. La camioneta era otra no cabía duda, esta era roja y mas grande. Nuevamente la escuincla mañosa esta escondida. Esto ya era un ataque directo , una mismísima burla. El conductor era idéntico a como lo imaginaba, en la parte de atrás traían refuerzos , tal vez por esa razón osaban pasar en mis narices , era asi como un desfile militar donde sacan lo mejor de sus armamentos para apantallar al enemigo. Mi  irada se encontró con la del conductor, los huevos se me subieron a la garganta , mis días en la barra no contaron , sentí como si me desinflara, el color se me fue – Que tienes pregunto Mc pelusa. Nada , nada conteste. Me tengo que despedir ciao Una vez dentro de la plaza , no daba crédito a mi actitud cobarde, como fue posible, hubiera estirado la mano y lo hubiera sacado de un solo tirón  atreves de la ventana , hubiera echo alto total a su desfile y a bola de puntapiés dictarle una serie de leyes a seguir. Hubiera y ibioera , pero se me ha repetido que el hubiera no existe , ahora lo que solo existía en mi era un síntoma escalofriante de frustración. Toda es noche no pude dormir , fue como hasta las cuatro de la mañana que cerré mis cansados ojos. Di vueltas y vueltas pensando en como chingaos haría `para partirles la madre. Modificaba una y otra vez mi plan de venganza.  Se cooooooooooompran, coooolchones, tambooooores, refrigeradoooores, estuuufaas, lavadooooras, microondas, o algo de fierro viejo que veeeeeendaaa. Estaba en la colonia, y al parecer se acercaba  a la unidad habitacional. Salte de la cama, vestí mi pantalón negro del dia anterior, cogí mis botas negras con hilos amarillos , me puse mi playera y mi sudadera hans de gooro negra, me puse mi diente, me cerciore de traer mis llaves mi cel mi cartera y delicados. Lave mis dientes moje cara y cabello pase el cepillo y Salí corriendo . no había tiempo que perder. Llegue a la puerta principal de la unidad habitacional y vi entre sus barrotes que la camioneta azul se acercaba lentamente , camine y me detuve  a mitad de la calle indicando con la palma de la mano muy estirada, un stop total. Mi respiración era muy agitada, me encontraba eufórico , todos los días en que me molestaron y persiguieron mientras robaban mi energía, se presentaban ahí mismo , mi ira era enorme , tenia ganas de comérmelos a los dos niña y padre devorados por rateros, diría el encabezado. Me acerque a la ventanilla donde posiblemente se escondía la chamaca , ella seria la primera en pagar la cuenta, pero no estaba, mire y mire, rebusque por debajo del asiento pero no no estaba, ni ella ni su guajolota. Me encolerice aun mas, me estaba tomando el pelo, la voz seguía sonando y cada puta vez mas fuerte , lo recuerdo bien. El padre me miraba atónito , no daba crédito a mi nueva actitud, durante años nunca me atreví a enfrentar la situación y así de la nada hacia acto de presencia y con toda la actitud de llegar hasta el límite de las consecuencias, me riba y parecía que intentaba encontrar un botón que expulsara su asiento de la camioneta. Gire pasando frente al motor , lo tome de la playera percudida le atice un tremendo chingadazo que le florio  el rostro sucio. Baje mi zíper, desenvaine el chisme y le dije en voz alta. – Haber jijisimo de la chingada cómprate este fierro viejo. Fieeeeeeeerro viejo que veeeeeeenda. Grite en su oído fieeeeeeero vieeeejo que veeeeeeenda, cabron, le pregunte. Donde demonios tienes a la escuinlca volvi a preguntar. Y si dije , regresando al cuanto blanco y vacio. Eso es lo último que recuerdo.

  

domingo, 10 de agosto de 2014

El Pedorro

El Pedorro

Debido al abandono de mi padre, mi madre se las veía negras en ocasiones. Regularmente el buffet constaba de huevito y frijoles. Esta dieta me producía una pedorrera incontrolable, la cual desde la primaria me hizo famoso. En un principio cotorreaba con ello. Siempre he sido muy bueno en los deportes, corría velozmente, por esa razón, me gane el apodo del avestruz. En la colonia como en la primaria era mas conocido por mi agilidad en los deportes que por mis pedos, siempre que anotaba un gol me tiraba uno de ellos, ganaba una carrera y me gritaban los compañeros – Tírate un pedito avestruz, y así lo hacía, todos reventábamos en carcajadas. Al entrar a la secu todo cambio, nuevas amistades nueva colonia, nuevas niñas y nuevos amigos.  Cuando se me antojaba tirarme un pedito lo hacia a discreción o de plano me los aguantaba, hasta que ya no podía mas, el estomago en ocasiones estaba a reventar, una vez tuve que romper una plática en pleno ligue con  Maricarmen, la Drupi, a unos pasos no aguante mas y prum salió.  –Hay que fue eso Ismael pregunto.-Un pinche cuetazo seguramente. Conteste. Y me aleje. Mis peditos ya me comenzaban a causar problemas, no era como en la primaria, me avergonzaba de ellos y luego ya ni comer quería. -Pues te chingas cabron, es lo que hay. Decía mi madre. O dejas de estudiar y te me pones a trabajar para comer otra cosa mi pedorrito. Mi corazón estaba dividido entre Maricarmen y la maestra de ciencias sociales a la cual le veía los calzones y medias por debajo del escritorio, cada cruce de piernas era para mi un evento que festejaba por las noches en privacidad después de mi oración. Un terrible día, en su clase, contestábamos un examen el cual me puso tremendamente nervioso y, “Pum”, así, de la nada, crujió un estruendoso sonido en el silencio del salón que salió de mis nalgas planas. Sonó tan fuerte, inmediatamente la mirada de todos era hacia mi. Con cara de yo no fui, serré mis piernitas , me encorve y me tape la nariz con la mano izquierda mientras arrugaba con la otra el examen como diciendo. Fue la hoja no mamen que me ven?. Me es muy difícil expresar con la fuerza adecuada, la terrible vergüenza que sentí en ese momento. Alargue la mirada y vi unos tenis rojos en el azul de la banca. Era el puto Alvin, ese pinche Ocampo, quien desde las alturas me señalaba y grito. –Se tiro un pedo el muy cabron. El salón entero reventó en carcajadas, la jefa de grupo Reveca que era muy pinche seriesita, lloro de la risa, la maestra desde su rincón se cubría con las manos la risa, Maricarme rio en principio y al ver mi estado se solidarizo, me miro con ternura. Desde ese día y hasta hoy soy el pedorro. No todo fue malo ese día pues a la salida, por lastima o no sé qué pedo, Maricarmen se me declaro. Era la escuincla  más hermosa de la escuela, de la colonia, del mundo. Desde ese día nos hicimos novios. Me hice popular en la escuela por mis pedos y por ser el mejor en el equipo de basquetbol. Ya en la Universidad a días de casarnos me dijo: -Pedorrito, yo te quiero mucho y pues yo no tengo pedos con tu apodo pero mi mama dice que si no te dejan de decir así no me dejara casar contigo, tienes que hacer algo mi amor, falta medio año para la fecha, haz algo para que ya no te digan así por lo menos en la fiesta ok?. Ok, Dije. Me propuse cumplir mi tarea. Amigo lector, créeme que no era una tarea fácil, a donde quiera que yo iba me decían el pedorro, en la carnicería, en la escuela, en el mercado, en la cancha, en el chopo, en la glorieta de insurgentes, en coyoacan, en la lagunilla, en la iglesia, en tlane, en la prado en todos putos lados me decían “ El Pedorro” bueno, hasta mi mama me decía pedorrini. -Señora se encuentra el pedorro? -Si, te hablan Isma .En la calle me gritaban, -Que onda pinche pedorro, cuantos kilos de fifi para hoy?, Osea, en todos lados me decían “El pedorro”. Créanme que en seis meses todo cambio. Caminaba del brazo con mi Mari y la gente me decía. –Que paso Isma, como te va. Ese mi isma animo. Buenas tardes Isma, si amigo lector lo había logrado. -Hay mi amor mi mama esta feliz, , y yo también. Pronunciaba mi Mari. Por fin nos vamos a casar pedo, perdón Isma. Y así fue, nos casamos. Ya en plena fiesta, abrazo con la suegra, besos, regaños y recomendaciones del suegro ya bien pedo, baile, comentarios de, Te quiero un chingo, unas palabras del compadre, besos y mas besos a la comadre, en fin una gran noche, hasta que un culero ya entrado en chupe, tomo el micrófono del sonido Papapancho y dijo:- Un sasaludo a mi compadre el pepepedorro. Trompetilla. Puta madre. La música paro, las copas dejaron de sonar, el silencio de aquel dia de examen regreso. –Esto es una pena. Grito mi suegra mientras cojia del brazo a tirones de su hija para arrancarla de mi lado para siempre. Me tire un pedo y bebi una copa que hasta hoy no termino.

lunes, 30 de junio de 2014

Resistencia

Resistencia Resistir no es nada fácil, mucho menos cuando nos referimos al complejo consumo del alcohol. Pareciera fácil, un ejercicio simple de levantamiento de codo pero no lo es, involucra un esfuerzo casi, casi sobre humano, desde el simple hecho de no ser aceptado por donde se inician las sociedades, es decir en la familia. Uno como consumidor de alcohol sufre enserio, tenemos que resistir humillaciones sin cuento, violaciones a la ley pues somos víctimas por el simple hecho de beber, ser culpables en un accidente automovilístico sin haber tenido nosotros la culpa , el que uno porte aliento alcohólico demuestra todo lo contrario a como realmente hayan sucedido las cosas. Puedo contarles un verdadero ejemplo de resistencia ante el copeo, pues tras un día, después de haber sido encarcelado injustamente, durante dos años siete meses, aun insisto en beber. Subí en la estación Hidalgo de la línea tres con dirección a la raza. El metro realmente estaba llenísimo, mi necesidad de ir a cobrar una lana a la colonia Emiliano Zapata era determinante, pues ya no tenía dinero para seguir consumiendo alcohol, y es que cuando llevas más de un mes de consumo de toni allans y ya la gama tan enorme de charandas y mezcalitos que venden en cualquier esquina es demasiado amplia, las crudas se vuelven insoportables a un minuto de la locura , sin mencionar el maraqueo tembloroso de el cuerpo completo que vuelven a uno incapaz de regalar autógrafos, por eso mismo trepe al Boeing 777 color naranja, la subida fue casi imposible, pero lo logre, comencé a sentir unos codazos terribles, en mis espaldas planas hasta las nalgas y costillas más un pisotón , inmediatamente el mezcal me dio el carácter de contestar a las agresiones, lo invite a bajarnos en la próxima estación y darnos en todititita la madre, el acepto confianzudamente, al ir subiendo por las escaleras que daban a la avenida del eje uno norte el eje leeeee, vi como se iba desabrochando su corbata y se la entregaba a un segundo, no me importo toque en son de apoyo mi mezcal en la bolsa del pantalón y suspire, ya en la avenida hice un stop total di media vuelta y atice el único chingadazo de mi parte, no supe mas hasta que llegue al hospital Rubén leñero, posteriormente al M.P. de la Cuauhtémoc donde iba ya en calidad de detenido, pues los lic`s se me adelantaron y dijeron que yo iba robando, que por esa razón me propinaron severa chinga, se me pregunto que día era , no supe contestar , que mes, tampoco supe que contestar. -No manito este tiene problemas serios con el alcohol, dijo la licenciada a un pasante, tan joven y guapo que es. Casi, casi dijo: culpable señor, y de ahí al norte por robo, condenado a dos años siete meses y condenado a pagar a ese tipo la cantidad de mil quinientos pesos por daños. A mi salida festeje con unos amigos y en menos de dos meses me encontraba en la misma situación, a punto de ingresar por riña y por portación de drogas las cuales en mi vida había visto, pero como hable francamente con los polis, les pedí que no me la fabricaran, que acababa de salir del reclu y que esa droga me la estaban sembrando, con tono prepotente el policía me dijo que agarrara mis cosas y que me retirara pero que hablara bien que dejara ese tonito canero carcelero que en nada me iba bien. Agradeciendo tome mis cositas y me desaparecí en lo oscuro de la noche detrás del teatro blanquita. Resistir no es nada fácil, la gente de inmediato pierde la confianza en que costo años de conseguirla, pues en los momentos importantes de la socialización, le damos duro y tupido al consumo y nuestros actos no son agradables a la vista de los otros, la honestidad molesta y más cuando viene de un don nadie ,de un don consumidor , don borracho, El dinero escasea, las mujeres se van sin decir adiós pues son celosas al alcohol y nosotros preferimos estar con él. Levantarse con temblorina y miedo es terrible, resistir un día mas cuando a veces no quisiéramos despertar mas, resistir filosofar sin fundamentos y empapados de surrazon cuesta trabajo, pero aquí estamos resistiendo por el momento, conozco de esto, salud!!!

Soy nervioso mas no loco

SOY NERVIOSO MAS NO LOCO Soy nervioso si lo admito , pero no loco, les voy a narrar por que lo mate al viejo, el era buen pedo si , no tenia yo nada en contra de el , pero su ojo , su chingado ojo, se le iba de vacaciones y eso me ponía mas nervioso, no sabia que hacer, en cuanto se le extraviaba sentía pena por el. Una noche quise hacerle el paro, le quise sacar de una vez por todas el puto ojo, según èl desde su infancia le había traído burlas y lo mantuvo siempre sin pareja. Llego la noche, lo agarre jeton, bien jeton, amacize el pica hielos, después de que le administre unos clonas, dos para el y dos para mi, por eso de que me daban valor los chingados chochos. Que se lo saco, mi lic, así a las de acá, y que me quedo con el ojal en mi mano izquierda, así mire, ve?, pum pum pac. Nervioso si, estaba muy nervioso, el pinche ruco en vez de agradecerme salió corriendo, nunca lo había visto correr al zángano jaja se veía rechiste el cábula , a duras penas llego hasta la puerta no lo contuve pues era nuevo para el andar sin su ojo, yo nervioso si por tanto pinche griterío, si nervioso, pero de tanto pinche grito despertó y alarmo a los vecinos, yo, nervio so y ahora sorprendido, le grite , - Pinche ruco en vez de agradecerme mira que desmadre has armado, relájate te veras mejor, tendrás mas personalidad con un parche como de pirata,- Si de esos como el de la novela de cuna de lobos se acuerda lic, que actuación caray. -Aparte ya no veras doble. La gente gritaba, se cubrían el rostro se tiraban al piso, lloraban yo nervioso no sabia que pasaba, salían con sus batas de los apartamentos me miraban con la mano llena de sangre y con el ojo entre ellas, miren miren les decía yo, si yo, lo he librado de su puto trauma, de esa chingada condena que lo ha mantenido siempre en la miseria de su soledad en el aburrimiento.- Al escuchar las sirenas, -Que a mi me habían dicho que cantaban rebonito, lo cual no es así, Agarre al cabron ruco y le metí una primer piquete, -pum. Sentí, como?, no se , algo bonito, sentí poder, las gentes me miraban con respeto, su único ojo me miro con boca bien abierta, se agarro el estomago y sin mas pensar, nervioso si mi lic, di un segundo un tercer metidon, un cuarto, no se ya ni supe cuantos fueron, al tiempo que le gritaba, pinche ruco tan mal agradecido, puto, borrega. Y ya, pum. Eso fue todo, llegaron ustedes y sin mas estoy aquí, díganme si no son chingaderas.

Premio Novel

PREMIO NOVEL Sonó la puerta, mire por el ojillo, vi a dos personas elegantemente vestidas al estilo francés, muy blancos de piel, el hombre llevaba sombrero y traje azul debidamente abrochado, ella un vestido rojo escotado que la hacia lucir hermosa. ¿Quién pregunte? –Buenas tardes se encontrara Mr. Ocampo? –Ha chinga eso de Mr. Ocampo me sonó extraño. ¿Departe de quien? – Mire venimos a entregarle un documento muy importante, si no se encuentra el disponible, podemos regresar otro día o bien dejarlo en el hogar. Su acento era extranjero y mi cultura malinchista me hizo sonreír. Estos no tienen pinta de judas, pensé. Abrí la puerta y vi como la chica me miro y sonrió abandonando completamente la postura, el tosió con todita la intención de interrumpir su viaje emocional e incorporándola nuevamente al instinto intelectual. –Soy yo Mr. Ocampo. -Mr. Ocampo es para nosotros un gran honor traerle personalmente como se nos indico ,la carta que a continuación daré lectura. Saco de su chaleco un lentesillo que coloco en su ojo izquierdo y leyó con voz ronca: EN RECONOCIMIENTO DE SU PODEROSA Y SIGNIFICATIVA LABOR LITERARIA A FAVOR DE LOS IDEALES HUMANITARIOS Y TENIENDO ESPECIALEMENTE EN CUENTA SUS NARRACIONES EPICAS RELATOS DE UN FUMADOR DE PIEDRA Y AVENTURAS EN LA PRADO PACHECO LA FUNDACION NOVEL DE ESTOCOLMO EN NOMBRE DE LA ACADEMIA SUECA TIENE EL GUSTO DEINFORMARLE QUE HA SIDO USTED ELEGIDO HOY PARA EL PREMIO NOBEL DE LITERATURA DE ESTE AÑO STOP EL PREMIO CONSISTE EN UNA MEDALLA DE ORO Y UN CHEQUE POR CINCO MILLONES DE DOLARES STOP LA CEREMONIA DE ADJUDICACION TENDRA LUGAR EN ESTOCOLMO EL DIA DIEZ DE DICIEMBRE STOP SIGUEN DETALLES STOP NUESTRAS MAS COORDIALES FELICITACIONES STOP. Termino, me entrego el documento nuevamente guardado en el sobre, me dio un abrazo, ella se acerco me miro a los ojos fijamente me abrazo fuertemente , suspiro en mi oído, sentí como lo lamio pero su lengua raspaba, abri los ojos aparte al gato, y el librote casi biblia de Irving Wallace. La puerta seguía llamando, mire por el ojo de la puerta mientras me rascaba los huevos y mire a dos sujetos con chamarras de piel bien panzones , con bigote, y lentes, cadenita de oro que apenas se veía por la placa. Hay no de nuevo pensé.